Guglielmo Godio obsequió a mi abuela Angélica Decoud “La divina comedia” cuando ella solo tenía cinco años.
A esa misma edad su tataranieta Catalina Inés Lotero recrea el valioso regalo, al recibirlo de manos mias.

Su dedicatoria :Alla mia piccola amica Angélica Decoud
Guglielmo Godio
Asunción Setiembre 1887

Galleria Dantesca Microscópica
MILANO 1880